lunes, 21 de mayo de 2007

Algunas cosas que me hacen feliz

Hay ciertas cosas que nos hacen feliz. Tengo la concepción de felicidad como algo momentaneo, efímero, con vaivenes y es por eso que determinadas circunstancias hacen que me ponga realmente contento y feliz.

Me siento realmente feliz cuando viajo en auto, en bus, en micro o lo que sea, me encanta ver y observar las cosas que existen alrededor de las carreteras.

Cuando viajo en bus o en micro, lo ideal es irme en los asientos de la ventana, cuando viajo y lo hago a la orilla es para mi algo verdaderamente desagradable, ya que no puedo ver todo lo que desearía ver y además de eso me produce más calor y nadie duda que viajar acalorado es una experiencia realmente horrorosa, deplorable.

Me encanta viajar durante largas horas y ojalá sin un destino determinado. Cuando llegué a Concepción aquel domingo 4 de marzo lo primero que hice, luego de arreglar mis cosas, fue tomar una micro y dar vueltas por la ciudad durante una hora y media y con eso poder conocer más el entorno que me esperaba durante estos 5 años. Y eso, aveces, lo sigo haciendo, a pesar de la cara de ofuscación que ponen los choferes cuando ya llevo más de una hora sentado y he estado dando varias vueltas por los mismos sectores.

Otra cosa que me hace feliz es salir a caminar de noche. En Quirihue solía hacerlo con absoluta frecuencia, todos los dias de la semana me tomaba un tiempo de dos horas (de 8 a 10 de la noche generalmente) para salir a recorrer las calles polvorientas, ir a la plaza y encontrarme con algún amigo y conversar un rato de asuntos que a nadie le importa. En Concepción tambien lo hago, aunque no por dos horas, sino que en un tiempo bastante más reducido. Todas las noches salgo al centro, a ver como a la gente y a mi se nos va la vida, a mirar el pasar de la juventud, a observar el cielo aveces rojizo por las luces o simplemente a caminar por caminar, espero que nada malo me pase en aquellos absurdos periplos.

Otra cosa que me hace muy feliz es pensar en que estarán haciendo las demás personas. Cuantas personas estan teniendo sexo a las 4 de la tarde en Concepción o cuantas personas sienten profundas ganas de suicidarse en una tarde de dia de semana. Aparte de eso me encanta pensar en lo que pudo ser y no fue, cuantas oportunidades que he dejado pasar y cuantas oportunidades que están en mis manos tomar y que finalmente no las tomaré.

Hay cosas que me hacen feliz a ratos, estar con mi familia ciertamente me hace feliz, pero no siempre. Aveces uno siente el deseo como un instinto natural de alejarse momentáneamente de las personas que más te quieren, pero ese alejamiento no es constante, al fin y al cabo, el cordón umbilical siempre existe y creo que sin mi familia no sería lo que soy, aunque ciertamente se que por el momento no soy nada.

Estar con mis amigos también me gusta, pero con los verdaderos amigos, no con aquellos que te dan la espalda o que simplemente son amigos de juerga o de circunstancias. Compartir con ellos, decirles alguna mentira blanca o contarle la mas profunda verdad es algo impagable.

Bueno, no quiero seguir extendiéndome más. Obviamente tambiene existen un par de cosas más que tambien me hacen feliz, pero ya es demasiado tarde para recordarlas... Finalmente creo que lo mas importante es que uno y el entorno de uno estén vivos y con eso conocer la felicidad, aunque sea momentánea.

viernes, 18 de mayo de 2007

¿Cuantos dias has vivido?

Puede parecer ridiculo, pero has sacado la cuenta alguna vez de ¿cuantos dias has vivido?
En un acto de profunda ociosidad yo si saque la cuenta de mis dias. Aproximadamente son 6649 dias, de los cuales no tengo una cifra estimada de cuantos he vivido en pleno, es decir, con profunda felicidad, en armonía y en paz con los demas y porsupuesto conmigo mismo.

Tambien al hacer este ejercicio, me percate que he tenido mas de 6 mil dias para decir te amo, para tener gestos de cariño, de benevolencia y de gratitud, pero, sin embargo, no he dicho te amo 6 mil veces, ni siquiera mil ni tampoco he tenido actos de grandeza 6 mil veces.

A que quiero llegar con esto , en realidad, a nada, solo que nos demos cuenta de que eso de esperar el momento es lo mas absurdo, los momentos no llegan solos, uno tiene que forjarlos, la vida es como un edificio, nos dan la base que es la familia y de ahi empezar a construirlo delicadamente hasta que este edificio cuando este en altura, sea imponente ante los demas.

Por eso, el saber cuantos dias he vivido, tambien me sirvio para darme cuenta todo lo atrasado que estoy, el saber que he tenido mas de 6 mil oportunidades para hacer algo y no lo he hecho, el conocer de que he vivido mucho, pero no plenamente, a replantiarme como ser.

Los invito a que analicen sus vidas y que estos dias que les quedan, busquen las oportunidades para no perder mas de seis mil dias como siento que lo he hecho yo.